Los principales beneficios de vaporizar cannabinoides

Descargo de responsabilidad: Toda la información proporcionada en este artículo tiene únicamente fines educativos. Este artículo no pretende en modo alguno atraer, animar o incitar a nadie a abusar de ninguna sustancia adictiva. El artículo no es apto para menores de 18 años.

Menor toxicidad

Al vaporizar, se vaporizan los principios activos, por lo que no hay combustión como en el fumar convencional. El calentamiento libera las sustancias activas pero no produce carcinógenos ni otros humos como alquitrán, monóxido de carbono y metales pesados.  

Fumar cigarrillos frente a vapear

Numerosos estudios han confirmado la relación entre el tabaquismo y una serie de efectos adversos para la salud, como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. El consumo de cigarrillos se considera un importante factor de riesgo de cáncer de pulmón. La probabilidad de morir por una enfermedad cardiaca se multiplica por cuatro como consecuencia del tabaquismo.

El humo del cigarrillo contiene aproximadamente 4.800 compuestos diferentes. Aproximadamente 100 de ellos son carcinógenos, cocarcinógenos y mutágenos conocidos. Esta compleja mezcla también contiene gases como:

  • ozono
  • formaldehído
  • amoníaco
  • monóxido de carbono
  • tolueno y benceno

Fumar cigarrillos, en combinación con otros factores de riesgo como la hipertensión y la hipercolesterolemia, contribuye al desarrollo y la promoción del proceso aterosclerótico.

Además de su innegable papel en el desarrollo del cáncer de pulmón, fumar cigarrillos también contribuye a muchas otras enfermedades crónicas, como la bronquitis crónica y el enfisema pulmonar.

Los usuarios de vaporizadores experimentan menos irritación respiratoria en comparación con las técnicas de combustión convencionales, como demuestran algunos estudios. Después de controlar los factores de riesgo, el uso de vaporizadores se ha asociado con menos síntomas respiratorios notificados en estos estudios en comparación con otras técnicas de combustión.

Sin embargo, es importante señalar que la vaporización tampoco está totalmente exenta de riesgos. Algunos estudios informan de que el proceso de calentamiento puede dar lugar a la formación de nuevos compuestos en descomposición que pueden ser peligrosos.

Vapear sin nicotina

El tabaco de los cigarrillos contiene nicotina, una sustancia extremadamente adictiva que tiene muchos efectos nocivos. Como han demostrado numerosos estudios, la nicotina afecta negativamente a los sistemas cardiovascular, respiratorio, inmunológico y reproductivo y puede comprometer la función pulmonar y renal.

Evita la nicotina cuando vaporices cannabinoides. Por ejemplo, las espumas desechables para vapear HHC y CBD contienen sólo destilado (concentrado de cannabis altamente concentrado) que contiene HHC o CBD, o una combinación de diferentes cannabiodes enriquecida con terpenos. También puedes probar las flores enriquecidas con destilado de HHC o CBD. La ventaja de las flores es que contienen una mezcla natural de cannabinoides y terpenos que actúan conjuntamente (efecto séquito) y pueden ser mucho más potentes que los cannabinoides por separado.

 

Máxima conservación de los principios activos

Cuando las plantas de cannabis se vaporizan, el contenido de cannabinoides es de casi el 95% y el 5% restante se compone de hidrocarburos aromáticos policíclicos y cariofileno, un aceite no tóxico que se encuentra en el cannabis y otras plantas. En cambio, el humo producido por el método de combustión del cáñamo sólo contiene un 12% de cannabinoides.

Las sustancias activas del cannabis se liberan a diferentes temperaturas. La temperatura ideal para vaporizar cannabis es de 180-200 °C. Sin embargo, algunos terpenos y flavonoides se liberan a temperaturas más bajas. Algunos tipos de vaporizadores permiten controlar la temperatura según las necesidades. Para conseguir los efectos deseados, estudia el punto de ebullición de cada cannabinoide, terpeno y flavonoide.

Mejor sabor y aroma

Otra ventaja de vaporizar cannabinoides es una mejor experiencia de sabor y aroma. El vapor producido durante la vaporización contiene componentes aromáticos. Es más limpio que el humo y puedes disfrutar de los ingredientes activos sin el olor a quemado y amargo. Aunque es difícil distinguir los diferentes ingredientes o variedades de cannabis al fumar, un vaporizador de calidad te permitirá hacerlo.  

Además, si prefieres los líquidos, puedes elegir entre una amplia gama de aromas y sabores – HHC vaporiza con limón, frambuesa o mango, además de sabores exóticos como piña colada.

Discreto e inodoro

La vaporización no produce humo desagradable como la combustión. El vapor del vaporizador se disipa a los pocos segundos de la exhalación. Por lo tanto, no hay riesgo de que el olor permanezca en la ropa, los muebles, el sofá o las cortinas.

Los populares vaporizadores portátiles también son relativamente discretos y apenas ocupan espacio. Y si quieres ser realmente discreto y disfrutar de los beneficios de los cannabinoides sobre la marcha, prueba un vaporizador portátil que quepa hasta en el bolsillo o bolso más pequeño.

Una plétora de opciones

Puedes vapear hierbas, concentrados o líquidos en una gran variedad de sabores. Elige entre cannabinoides individuales o combinaciones de cannabinoides en diferentes proporciones, dependiendo de los efectos que quieras conseguir. Hoy en día hay un gran número de vaporizadores para elegir a diferentes niveles de precio, por lo que sólo depende de las preferencias y necesidades del usuario.  

Resumen

El vapeo aporta varias ventajas, como la conservación de los principios activos, una mejor experiencia de sabor y discreción. La vaporización no quema, y no se producen carcinógenos como el alquitrán y los metales pesados. Las flores, los líquidos y los concentrados de cannabis no contienen nicotina ni otros ingredientes adictivos. El vapeo permite controlar la dosis y la intensidad de los efectos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el vapeo no está exento de riesgos. Para eliminar estos riesgos en la medida de lo posible, elija sólo productos certificados de vendedores de confianza. Siga siempre las instrucciones de uso del fabricante a la hora de manipular, ajustar y limpiar su vaporizador.

 

 

Foto: Shutterstock

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